Cada vez somos más las personas que nos sumamos a la práctica de salir a correr. Con el buen tiempo, el gimnasio y las salas cerradas van quedando relegados a un segundo plano. Y es que la moda del running ha llegado para quedarse.
Cualquier momento del día es bueno para salir a hacer un poco de ejercicio físico; ya sea en el parque, en el paseo o en una calle ancha. Este es el secreto de la tendencia runner: todo el mundo lo puede practicar sin necesidad de gastar dinero, de apuntarse a ningún sitio, de cumplir unos horarios pautados, etc. ¡Asequible para quien quiera!
Ahora bien… Debemos tener en cuenta que no hay que hacerlo a la ligera. Toda práctica de ejercicio físico requiere una preparación y el running no iba a ser menos, ¿no? Cuidar tu hidratación y tu alimentación es clave para ejercer una práctica saludable.
¿Cómo debemos hacerlo? ¡Fácil! Si realizamos más de una hora de ejercicio de alta intensidad, deberemos reponer energía rápidamente. Por ello, lo ideal es aprovechar los 30 minutos una vez finalizada la práctica para tomar hidratos de carbono, ya que durante este período el cuerpo está más receptivo.
Ideas… Podemos tomar un plátano, cerezas o higos al llegar a casa. Así pues, entre las diferentes frutas que podemos consumir están el plátano, la manzana sin piel, los higos y las cerezas. Ten en cuenta que todo depende del tiempo y la intensidad de la práctica.
Sin embargo, si salimos a correr por la tarde-noche, es decir, antes de cenar, la cosa cambia; tomar una pieza de fruta no será suficiente. En este caso, deberemos tomar algo más consistente. Por ejemplo, verdura con pechuga de a la plancha y una pieza de fruta.
Por último, no olvides que también debes mantenerte bien hidratado. Toma agua de forma regular. ¡Preparados, listos… Ya!