Hola Jasmin, no deberías calmar un estado anímico con comida, puesto que no sirve para eso. Debemos alimentarnos para mantenernos saludables, disfrutar de los alimentos pero no aferrarnos a ellos para calmar un estado anímico, mucho menos de ansiedad, donde la tendencia es hacia una mala alimentación.
Mi recomendación es que para calmar la ansiedad (sea lo que sea que la provoca), actúes en la raíz del problema.
Acudir a terapia no nos tiene que dar ni miedo ni vergüenza, pues son profesionales sanitarios que nos ayudarán a solucionar o a entender las razones que nos estén causando este estado de ansiedad. Así como nosotros, los dietistas nutricionistas os podemos ayudar a mejorar vuestros hábitos alimentarios, los psicólogos (entre muchas otras tareas) nos pueden ayudar a relacionarnos mejor con los alimentos.