Hola Belén,
Coincido con Rosa.
La única lectura posible en la línea de lo que preguntas es que, si tomamos fruta como media mañana o incluso aperitivo antes de las comidas, ésto puede ayudarnos a reducir la ingesta. Sería el caso si dicha fruta desplazase a posibles alimentos más calóricos que componen normalmente las comidas principales