¿Parece una asociación sencilla verdad? Una conclusión a la que incluso un niño o niña de educación infantil podría llegar aplicando reglas matemáticas muy básicas. Nada más lejos de la realidad. Para que una dieta de aumento de peso tenga éxito, una buena planificación es esencial.
Si no se eligen los alimentos con conocimiento, el riesgo de perjudicar la salud aparece automáticamente. De sobra se sabe qué alimentos son los causantes de la obesidad y sobrepeso hoy en día por la gran cantidad de energía que aportan en todos los países occidentales del mundo (comida rápida, platos preparados industriales, dulces y golosinas, bollería industrial…).
Ésta comida no es recomendable en ningún caso, ni tan siquiera el de engordar voluntariamente. La razón es que se asocian con gran evidencia efectos negativos para la salud paralelos, como pueden ser por ejemplo el aumento del riesgo de enfermedades del corazón, diabetes, caries, efecto adictivo y en general perjudica a todos los órganos del cuerpo, incluyendo el cerebro.
En estos casos, los alimentos clave que proporcionarán en la dieta el extra de energía que necesitamos (aunque no han de ser los alimentos mayoritarios de la dieta en general y menos aún limitarse exclusivamente a ellos), serían los frutos secos y cremas caseras de frutos secos, frutas desecadas, patés vegetales, aguacate y aceite de oliva virgen extra. Al contrario que la comida basura, además de las kcal extra nos aportan vitaminas, minerales y fibra muy importantes para la salud.