¿Niños y cocina? ¡Una relación perfecta!

Deja que ellos sean tus pinches de cocina, y tú como jefa/e de cocina dale órdenes de lo que tienen que ir haciendo.

¡Uno más! Con la llegada de las vacaciones y el frío, qué mejor calor que el del hogar para sumergirse entre los fogones de la cocina, preparar postres caseros, entrantes sanos y ligeros, y cocinar el plato principal con la colaboración de los más pequeños. Y es que te animamos a que estas navidades dejes que los niños invadan la cocina y sean tus ayudantes. 

¿Cómo lo podemos hacer? ¡Atento! Siempre hablamos de los hábitos saludables y la alimentación cuando nos referimos a niños, pero fijaros qué manera tan sencilla de inculcar a los niños unos buenos y saludables hábitos alimentarios, tan solo con dejarlos sumergirse un poco en la elaboración de nuestros platos.

Así pues, es tan simple como empezar por confeccionar recetas fáciles y sencillas (quizás que no necesiten fuego) y empezar poco a poco, desde platos más sencillos, hasta algo más complicados. ¡Deben ser partícipes desde el principio!

Por ejemplo: preparar la merienda, un pequeño sándwich o un mini bocata, donde cada uno añada lo que más le apetezca, y que siempre puedas orientar para que elijan lo más saludable, que en su bandeja quede espacio para un vaso de agua y una pieza de fruta o un puñado de frutos secos.

Deja que ellos sean tus pinches de cocina, y tú como jefa/e de cocina dale órdenes de lo que tienen que ir haciendo. Si vas hacer guisantes salteados con gambas pueden ser tus ayudantes para pelar los guisantes y gambas. En caso de que se trate de un plato con tortilla pueden batir los huevos, y poco a poco irán aprendiendo los ingredientes que llevan sus platos favoritos.

Tocar el pescado, es algo por lo que los niños suelen tener mucha aversión, no solo a la hora de tocarlo sino también a la hora de comerlo, así que es un buen momento para que te vean prepararlo y te ayuden a preparar una rica guarnición. Quizás si eliges aquellos que no sean lomos o filetes y preparas los que conserven su forma de pez les llamará la atención y les incitará a probar cosas nuevas.

Y, por supuesto, como broche final, dejar que se pringuen de harina a la hora de preparar sus postres caseros favoritos, no habrá otra cosa más sana y dulce para tomar.

Así... Recuerda, la cocina es como un laboratorio, en ella se pueden descubrir sabores, colores, y olores nuevos que no conocíamos antes y que pueden resultar muy apetecibles y saludables. ¡Aprovecha las vacaciones para enseñarle algo nuevo a los más pequeños de la casa!