Conoce más sobre la dieta disociada y la dieta cetogénica
¿En qué consiste la dieta disociada y la dieta cetogénica? ¿Cómo puede repercutir a nuestro cuerpo llevar a cabo este tipo de dietas?
Hace poco hemos empezado año nuevo y con él llegan los nuevos propósitos, entre ellos dejar de fumar, hacer más ejercicio y, cómo no, perder peso. Todos ellos son objetivos buenos, no obstante, lo más importante es, y será, mantener estos buenos propósitos más allá de los primeros meses del año. Si ya hemos tomado la decisión de cambiar nuestros hábitos alimentarios a mejor, invirtiendo así en salud, tenemos que evitar a toda costa caer en algunos de los errores más comunes, entre ellos la trampa de las dietas milagro. Y para eso, tenemos que saber identificarlas. Las dietas milagro se caracterizan por: ser desequilibradas en nutrientes, prometer pérdidas de peso elevadas en muy poco tiempo, efecto yoyó una vez se dejan de seguir y pueden presentar consecuencias graves para la salud. Bajo el nombre de dietas milagro se esconden múltiples dietas como la de la alcachofa, la de los grupos sanguíneos, la dieta cetogénica, la dieta disociada, la de los puntos… A continuación os explicamos dos de las más extendidas:
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Dieta disociada: se basa en no mezclar los macronutrientes (hidratos de carbono, proteínas y grasas) en una misma comida porque, según su base, unos se digieren en un medio ácido y los otros en un medio básico. Básicamente, el hecho de no poder mezclar alimentos hace que los menús sean poco calóricos y aburridos, por eso la energía que se ingiere es poca, permitiendo, en un principio, bajar peso. ¿Pero a qué precio? Al precio que se pueden estar siguiendo unos menús muy desequilibrados y deficitarios en nutrientes y por lo tanto, ser un riesgo para la salud. Además, su base carece de rigor ya que, en realidad, es imposible no mezclar macronutrientes porque los alimentos no son puros de por sí, sino mezclas de macronutrientes.
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Dieta cetogénica como la atkins, la paleolítica o la keto. Estas dietas son las también conocidas como low-carb, dietas con un % de carbohidratos muy reducido. Seguir una dieta cetogénica supone entrar en un estado metabólico de cetosis en el que el cuerpo busca la energía en la oxidación de grasa con la consecuente pérdida de peso. Al igual que en la dieta disociada, todo tiene un precio y, en este caso el precio puede ser: mal aliento, orina concentrada, estreñimiento severo, mareos, pérdida de atención y prolongada, puede repercutir en daños en la masa muscular.
En definitiva, tanto la dieta disociada como la dieta cetogénica y todo el listado que conforman las dietas milagro son dietas que hacen recomendaciones sin ningún fundamento sólido, ni evidencia científica y contradicen, además, las bases de una dieta saludable, variada y equilibrada. Si tienes cualquier duda sobre dietas populares o dietas milagro puedes mandar tu pregunta a un dietista nutricionista que te responderá y asesorará.