Trabajo, clases, viajes… si le sumamos la gran oferta de productos cargados de azúcar y grasas que nos encontramos en cada esquina, se nos puede hacer muy difícil el poder tomar un tentempié que realmente nos sacie, nos guste y además nos aporte beneficios.
Seguir una alimentación vegetariana (en cualquiera de sus variedades) es saludable, y las personas que la realizan por lo general llevan una vida más activa, lo que la hace más beneficiosa.
De más está decir que el consumo de frutas debe ser diario, unas 3-4 raciones al día es lo recomendado. Nos hidratan, aportan energía, fibra, vitaminas, minerales y otras sustancias beneficiosas como los antioxidantes.
El número de personas preocupadas por la presencia de metales pesados en los alimentos que consume está aumentando en los últimos años, quizá debido al impacto de los medios de comunicación en la materia.
Cuando se realiza ejercicio físico, la mayor parte de suministro de energía proviene de los hidratos de carbono, que se almacenan en forma de glucógeno en músculos e hígado
Cada vez son más los investigadores que apuntan a los azúcares refinados (dulces, golosinas, refrescos…) como los alimentos más dañinos para la salud consumidos en exceso.